En 1990 su padre Jorge Sivak se suicidó lanzándose al vacío. Martín tenía 15 años. Quedó a cargo de la empresa familiar cuando en 1985 su hermano mayor fue secuestrado y asesinado. Del duelo que demoró un cuarto de siglo emerge esta historia única y universal de un padre y un hijo. Con honestidad descarnada intenta salvar del naufragio de la memoria las preguntas que quedaron sin respuesta... |